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Cómo limpiar cualquier cosa en la guía útil Asiselimpia.com
Cómo Limpiar Oro

Cómo limpiar oro

El oro es un material del que puedes obtener las joyas más preciosas, a diferencia de otros metales, como la plata, es muy resistente al paso del tiempo, su brillo se preserva mejor ante el paso de los años mejor que otros. Sin embargo, es necesario aún así tener ciertos cuidados, pues si bien no se vuelve opaco con tanta facilidad, no está exento de la suciedad y mugre que es común encontrar en el día a día. Es por ello que traigo algunos consejos para la limpieza y cuidado de tus joyas de oro, de esta forma podrás lucirlas de la mejor manera.

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Materiales y Herramientas

  1. Limpieza con un paño de algodón o microfibra.
  2. Bicarbonato de sodio
  3. Cepillo de dientes
  4. Agua
  5. Jabón

Cómo limpiar oro amarillo

Este es el oro más común que encontrarás, es por ello que comenzamos con el mismo, más adelante verás con detalle cómo limpiar oro en otra de sus aleaciones.

1.Con jabón

Entonces, la primera opción, y la más clásica, es usando un jabón líquido o lavavajillas, un detergente suave. Esto lo haces colocando en un recipiente 5 ml del jabón en un litro de agua, lo agitas hasta que haga burbujas y dejas en esa preparación las joyas 10- 15 minutos.

Luego de esto las sacas de ahí y con un cepillo de dientes untado con bicarbonato de sodio frotas (suavemente para que no se raye la pieza) para que la suciedad termine de desprenderse.

Igualmente, usa un cepillo de cerdas suaves para garantizar mayor cuidado, luego de esto enjuagas con tibia y secas, de preferencia con un pedazo de gamuza o con un material muy suave, pues te repito, hay que evitar cualquier rayón.

Es importante que antes de hacer esto verifiques que la prenda no esté rompiéndose o, en caso de tener piedras preciosas, no le falte ninguna, en caso contrario no continúes la limpieza, corres el riesgo de que se deteriore más, llévala a un orfebre.

Puedes también realizar el proceso previo pero en el recipiente le colocas papel aluminio y allí echamos el jabón y agua caliente para lograr un proceso llamado intercambio de iones lo cual garantiza un mayor desprendimiento de la suciedad.

2. Con amoniaco

Otras técnicas implican remojar las piezas en un preparado hecho con una parte de amoníaco y seis de agua. El proceso es el mismo, frotar y luego secar, eso sí, debes enjuagar muy bien las prendas porque el amoníaco puede causar molestias en la piel.

Asimismo, usa esta sustancia en joyas que no tengan piedras, pues como es tan abrasivo las dañará, el mismo caso en prendas muy finas. Una manera efectiva de limpiar oro es a través de una sustancia ácida, en este caso se utiliza la aspirina efervescente.

Es muy sencillo en un vaso o un bol pones agua y de una vez las prendas con las aspirinas, dejas que se disuelvan y sacas las piezas, puedes secar y frotar un poco con un paño para un mejor acabado.

3. Con vinagre

Otra sustancia ácida a usar es el vinagre, utiliza media taza de vinagre y una taza de agua, deja remojar las joyas allí unos minutos y realizas el resto de proceso, es decir, frotar con un paño y secar muy bien.

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Cómo limpiar oro blanco

A diferencia del amarillo esta aleación se caracteriza por poseer rodio, este es más fácil de ensuciarse justamente por su color y requiere una limpieza más recurrente que el anterior, asimismo implica otro tipo de producto a usar.

1. Con jabón y bicarbonato

Aunque, al igual que el oro amarillo, puede limpiarse usando el primer proceso descrito previamente con agua, jabón líquido y el cepillo con bicarbonato. Los más usado en su cuidado es el huevo, así es, ese mismo que utilizas en el desayuno.

Debes separar la yema de la clara y sólo usarás esta última, bátela muy bien y la aplicas sobre las prendas que desees limpiar, espera que seque y con un paño suave frota cuidadosamente, la verás brillante nuevamente.

2. Con limón

Puedes emplear productos ácidos, pero en este caso será el limón lo que te ayudará; pon las piezas a remojar en agua con unas gotas de limón y aparte prepara una mezcla con el jugo de un limón y bicarbonato de sodio debe quedar como una pasta, la cual untarás en un cepillo de dientes y lo aplicarás en las joyas aún húmedas.

Sencillamente quedará enjuagar y quitar la humedad. Otro proceso viene de la mano de la pasta de dientes, ideal para las superficies lisas, es importante usar pasta como tal, la cremosa, y no aquella que viene en gel para un mejor acabado.

Tal como si fueses a cepillar tus dientes, coloca la pasta en el cepillo y frota las piezas con delicadeza. Luego pule con un trapo de joyería si tienes, enjuaga para que no quede ningún residuo y secas, realmente brillarán.

3. Con gaseosa

Y dentro de todo esto, las bebidas gaseosas también tienen su papel en la limpieza de este metal, puede usar de estos refrescos o sodas para que recuperen el brillo. Haz una mezcla de una parte de la gaseosa con una parte de bicarbonato donde dejarás remojando las joyas unas horas, luego sólo debes secar con un paño suave.

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Productos para limpiar oro

Como has podido leer en casa encuentras gran cantidad de elementos para el cuidado de las piezas de oro, los más destacados son el bicarbonato de sodio y el jabón líquido o lavavajillas, asimismo no falta el cepillo de cerdas suaves y una toalla o paño de textura delicada para el secado.

Sin embargo, en el mundo de la orfebrería existen otros productos más especializados, como por ejemplo los paños de microfibra, estos son de material muy suave y existen específicos para el tipo de metal o piedra.

Podrás encontrar limpiadores especializados que vienen en forma de pomada, siendo esto brillos de oro en los que sumergir las piezas para que obtengan su resplandor. Existen también gotas para abrillantar así como fórmulas y sprays para arrancar la suciedad, contando también con líquidos pulidores.

Por otro lado, como te he mencionado varias veces, estos procesos requieren de delicadeza, es por ello que en la orfebrería utilizan guantes y mitones especiales para el tratamiento de las joyas.

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Trucos caseros para limpiar el oro

Si bien te hemos mostrado la manera de dejar brillantes nuevamente tus piezas de oro desde casa, te daré algunos tips que facilitarán el proceso y te ayudarán a no cometer las clásicas equivocaciones.

En primer lugar, en varios de los procesos que te acercamos supone tener que enjuagar las joyas, esto es algo que puedes hacer en el lavabo pero siempre corres el riesgo de que puedan irse por el desagüe ¿cómo lo evitas? Pues primero verificando que el mismo en cuestión esté cerrado, pero también puedes emplear un colador.

Esta herramienta es de gran ayuda sobre todo si has de limpiar pendientes muy pequeños, anillo o cadenas.

Evita usar cloro. Esta sustancia en muy agresiva y maltratará las piezas, a pesar de que haya una cuantas que lo resistan, es recomendable no usarlo, no tendrás certeza de qué prendas serán adecuadas para ello.

Cómo limpiar el oro en casa

Para limpiar el oro en casa debes tener en cuenta que el agua caliente no es la mejor opción, si bien hay joyas de oro amarillo puro que pueden aguantar el uso de agua hirviendo, debes evitarla en aquellas que contengan piedras, ya que puede que se agrieten o modifiquen; asimismo, si están adheridas con pegamento o goma es probable que este ceda y se caigan.

Cuando uses las joyas evita rociarlas con perfume, esto hace que se ensucien con mayor rapidez, al igual que el uso de perfumes. Acostúmbrate a lavar tus prendas tras su uso prolongado y de forma ocasional, no cuando estén al extremo cubiertas de mugre.

Para su cuidado, no guardes las prendas mezcladas, ten las pulseras de un lado, los anillos por otro y los pendientes juntos en su apartado; igualmente, no mezcles oro blanco con plata, esta última tiende a ennegrecerse y puede maltratar las otras joyas.

Ten un cepillo especializado para la limpieza de estas piezas, como he dicho varias veces, de cerdas suaves. Tenlos guardado en un lugar especial donde no se contamine, así como el paño que utilices para secarlas.

Asegúrate de siempre secar muy bien las joyas tras su aseo, la humedad perjudica el brillo de estas, así que debes garantizar que cuando vas a guardarlas deben estar totalmente secas y sin ningún tipo de residuo.

A la hora de almacenar las prendas usa recipientes donde no vayan a rayarse, puedes usar bolsitas particulares para meterlas allí según el tipo de joya. También puedes usar cajitas recubiertas, poniéndoles un trozo de tela como gamuza.

En caso de que hayas realizado los métodos propuestos y aún así las piezas mantengan suciedad o se vean opacas, acude a un orfebre, este especialista conoce procesos aún más meticulosos y productos especializados que devolverán la vida a estas.

De igual manera, si en primera instancia las joyas están en exceso cubiertas de mugre y suciedad te recomiendo asistir de una vez al orfebre, puede que estas no logren limpiarse adecuadamente con métodos caseros y más bien terminen por estropearse al insistir con estos medios.

No está de más que de vez en cuando, aparte de la limpieza casera periódica, lleves igualmente las joyas al profesional en cuestión, el oro blanco debe llevarse anualmente y el amarillo por lo menos cada dos años, de esta manera les devolverán su brillo inicial, como cuando las adquiriste por primera vez.

¡Siguiendo estos pasos garantizarás que tus joyas estén en perfecto estado!

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